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Sabores del mar y la tierra en el restaurante del Gran Hotel Victoria
Gran Hotel Victoria



Santander tiene el aroma del mar Cantábrico, y está impregnada de encanto pesquero y elegancia. Es un paraíso tanto para los habitantes de la ciudad como para los viajeros, quienes encuentran en sus mesas, bares y restaurantes auténticos placeres culinarios que convierten a Santander en una parada obligada para los gourmets y amantes de la buena gastronomía.


La gastronomía típica de Santander se basa en los productos del mar, que gozan de gran fama por su calidad y frescura. Los pescados y mariscos son auténticas delicias que deleitan a los comensales. Aunque su gastronomía no se limita únicamente a los pescados y mariscos, sino también cuenta con carnes sabrosas, platos tradicionales como cocidos y postres como la quesada pasiega o los sobaos. Santander y Cantabria en general tiene una gastronomía muy extensa y diversa.


Platos emblemáticos de Cantabria


En nuestro restaurante, estamos orgullosos de ofrecer una amplia selección de platos que representan la rica tradición gastronómica de Cantabria. Comenzando con el mar, uno de los tesoros más preciados de la región, encontrarás una variedad de delicias marinas que deleitará tu paladar.


Las anchoas de Cantabria son una verdadera joya en conserva del Cantábrico, y hemos seleccionado las mejores para que nuestros comensales disfruten. Estas anchoas, capturadas durante su mejor período en la llamada costera de abril a junio, se distinguen por su color uniforme, que va desde un marrón claro hasta un rojizo intenso. En boca, una buena anchoa debe ser tersa, masticable y ofrecer cierta resistencia, con un sabor y aroma sutiles que evocan el mar. Las acompañamos con un aceite limpio y brillante, para realzar su exquisito sabor.


Otro plato estrella en nuestro menú son las rabas, la fritura cántabra por excelencia. Ya sean las rabas de calamar (magano), de pulpo, de cachón o de pota, todas se caracterizan por su corte alargado y elegante, su enharinado uniforme pero sutil, y su textura poco grasosa. Son un plato muy típico de Cantabria y representan parte de la esencia de nuestra tierra.


Además de los tesoros del mar, en nuestro restaurante también preparamos el cocido montañés, uno de los platos más representativos de la cocina cántabra. Este reconfortante plato se elabora con alubias blancas y berza como base, y se enriquece con chorizo, patata, costilla, tocino y morcilla. Su historia se remonta a siglos pasados, cuando los pastores lo utilizaban como remedio contra el frío invernal. Nuestro cocido montañés, con su sabor tradicional y abundante, es la opción perfecta para recargar energías después de una caminata por la ciudad.


Por supuesto, no podemos pasar por alto los dulces típicos de Cantabria. La quesada pasiega, un postre tradicional que localizarán únicamente en nuestra región, es una verdadera delicia. Elaborada con ingredientes como mantequilla, azúcar, huevos, harina de trigo y leche de vaca cuajada, la quesada pasiega es un verdadero arte culinario que no pueden dejar de probar. Su textura cremosa y su sabor delicado, aromatizado con limón rallado o canela, les brindará un final dulce y satisfactorio a su experiencia culinaria en nuestro restaurante.


En el Gran Hotel Victoria nos enorgullece presentar una selección de platos típicos de Cantabria que capturan la esencia de la región. Desde las exquisitas anchoas y rabas, hasta el reconfortante cocido montañés y los dulces tradicionales, cada plato es preparado con cuidado y pasión. ¡Buen provecho!